nina-de-13-anos-inventa-la-cura-para-el-hipo
Combinando 3 de sus remedios favoritos:
una paleta o lollipop, vinagre de
sidra de manzana y azúcar.
'Esos tres elementos accionan en la garganta
una serie de nervios responsable del reflejo del hipo. Básicamente se
sobre-estimula esos nervios y se cancela el hipo',
Saturday, May 19, 2012
Tuesday, May 15, 2012
Mononucleosis infecciosa
Mononucleosis infecciosa | |
---|---|
Clasificación y recursos externos | |
CIE-10 | B27 |
CIE-9 | 075 |
CIAP-2 | A75 |
MedlinePlus | Información de salud en la enciclopedia MedlinePlus |
PubMed | Buscar en Medline mediante PubMed (en inglés) |
Sinónimos | |
Enfermedad de Pfeiffer. Enfermedad de Filatov. | |
Aparece más frecuentemente en adolescentes y adultos jóvenes, y los síntomas que la caracterizan son fiebre, faringitis o dolor de garganta, inflamación de los ganglios linfáticos y fatiga.
Se transmite principalmente por el intercambio de saliva, a través de besos, al beber del mismo vaso o de la misma botella, y al compartir comida o bebidas con otras personas. Aunque el tiempo durante el cual una persona con la enfermedad es contagiosa varía, las personas pueden ser contagiosas mientras tengan los síntomas (la fiebre normalmente cede en 10 días y tanto la inflamación de ganglios linfáticos como la del bazo se curan en 4 semanas1 ) y hasta por unos cuantos meses después. Asimismo, el virus puede vivir durante varias horas por fuera del cuerpo.1
Historia
El término de mononucleosis infecciosa fue introducido en 1920 por Emil Pfeiffer, cuando se describió un síndrome caracterizado por fiebre, linfadenomegalias, cansancio y linfocitosis en seis pacientes. Pero en 1968, Henle demostró que el VEB era el agente etiológico de los síndromes mononucleósidos (MNS) asociados con la presencia de anticuerpos heterófilos.
Virus de Epstein Barr
El virus de Epstein Barr es la causa más común de la mononucleosis infecciosa. Este virus también se le asocia a ciertas neoplasias como linfoma de Burkitt africano, carcinoma de nasofaringe indiferenciado y enfermedades linfoproliferativas. Datos epidemiológicos y serológicos sugieren la asociación entre VEB y enfermedad de Hodgkin, aunque la exacta contribución del virus al desarrollo de este tumor no es conocida. Está en investigación el papel que pueda desempeñar el VEB como cofactor en la patogénesis del cáncer de cuello uterino.
Síntomas
La fiebre es una de las características más comunes. Los ganglios linfáticos suelen estar inflamados, generalmente en forma moderada, haciéndose accesibles a la palpación en todos los territorios, incluyendo los ganglios epitrocleares que se perciben por arriba del olécranon o codo, pero con neto predominio de los cervicales. Si bien las adenomegalias carotídeas son las de mayor tamaño, las cervicales posteriores son las más características. Suelen ser simétricas, libres, elásticas y sensibles a la palpación. Puede haber adenomegalias profundas, sobre todo en hilios pulmonares y mediastino. En la mitad de los casos se acompañan de esplenomegalia, y en el 10 por ciento, de hepatomegalia.
La faringitis es de características variables, desde eritematosa hasta pultácea (levemente purulenta) o úlceromembranosa. El síndrome dérmico está caracterizado por una erupción generalmente de tipo exantemático, en la mayoría de los casos fugaz, y ocasionalmente asociada con un verdadero exantema. Otros síntomas frecuentes son: escalofrío, diaforesis, cefaleas (fuertes dolores de cabeza), artromialgias (dolor en músculos y/o articulaciones), astenia (decaimiento, agotamiento). Desde el punto de vista hematológico lo característico y de capital importancia diagnóstica es la linfocitosis con presencia de linfocitos atípicos. El Monospot o las pruebas de anticuerpo heterófilos sirve para confirmar el diagnóstico, el cual es más fiable en pacientes mayores de cinco años. Los síntomas pueden ser también náuseas, vómitos y anorexia, así como fatiga extrema y apatía.
Psoriasis
La psoriasis (AFI: [soˈɾja.sis], del griego ψώρα, picor) es una enfermedad inflamatoria crónica de la piel
que produce lesiones escamosas engrosadas e inflamadas, con una amplia
variabilidad clínica y evolutiva. No es contagiosa, aunque sí puede ser
hereditaria, es más probable que la hereden los hombres que las mujeres.
Puede afectar a cualquier parte de la piel, frecuentemente a las zonas de codos, rodillas, cuero cabelludo, abdomen y espalda. No es raro que produzca afectación de las uñas. En ocasiones produce complicaciones como la artritis psoriásica.
Puede afectar a cualquier parte de la piel, frecuentemente a las zonas de codos, rodillas, cuero cabelludo, abdomen y espalda. No es raro que produzca afectación de las uñas. En ocasiones produce complicaciones como la artritis psoriásica.
- 1 Clasificación
- 2 Epidemiología
- 3 Etiología
- 4 Patogenia
- 5 Anatomía patológica
- 6 Clínica
- 7 Diagnóstico
- 8 Diagnóstico diferencial
- 9 Tratamientos
- 10 Pronóstico
- 11 Referencias
Eflorescencia
En medicina, la eflorescencia es un cambio en la epidermis,
que puede afectar a su color, apariencia o textura. Es un elemento
fundamental de las lesiones patológicas, que se usa para describirlas.
Las eflorescencias primarias son los cambios que provienen directamente del proceso patológico en la piel. Como no están "falsificados" por los cambios secundarios, tienen un valor diagnóstico más alto. Las eflorescencias primarias incluyen:
Pertenecen a las eflorescencias secundarias:
Las eflorescencias primarias son los cambios que provienen directamente del proceso patológico en la piel. Como no están "falsificados" por los cambios secundarios, tienen un valor diagnóstico más alto. Las eflorescencias primarias incluyen:
- Mácula (mancha): se define como un cambio de color de la piel sin ningún cambio de consistencia.
- Pápula (nódulo): elevación pequeña, bien definida, palpable que llega sobre el nivel de la piel, tiene un tamaño de aproximadamente <10mm.
- Nodus (nudo):1 como las pápulas, pero mayores (>0,5 cm).
- Vesícula (ampollita): elevación de la piel por colección de fluido (suero, sangre) en las diferentes capas de piel.
- Bula (ampolla): similar a la vesícula, pero más grande que una lenteja.
- Pústula: vesícula llena de pus.
- Urticaria (habón): elevación producida por la histamina, plana, blanda, edematosa de color más pálido hasta rojo pálido que va en la mayoría de los casos acompañado de un picor.
- Comedón (espinilla): tapón teñido oscuro (en la mayoría de los casos), que cierra la salida del canal del folículo.
Pertenecen a las eflorescencias secundarias:
- Escama de piel (caspa): placas visibles a ojo desnudo.
- Costra: maduración de secreciones secas.
- Cicatriz: tejido conjuntivo reformado, fibroso, como sustitución de una pérdida sustancial (importante) de piel.
- Erosión (abrasión): se da en las capas superiores de la epidermis hasta donde las capas de la piel se pueden cicatrizar.
- Excoriación: erosión que concierne a todas las capas de la epidermis. No es posible la curación de la cicatriz.
- Grieta: separación estrecha, en forma de hendidura de todas las capas de la epidermis.
- Úlcera: destrucción profunda de tejido con curación cicatrizada.
- Atrofia: pérdida de piel y creación de apéndice de piel.
- Quiste: cavidad cerrada por tejidos con contenido líquido.
- Liquenificación: engrosamiento de la piel causado por enfermedades crónicas de la piel.
- Callo (tyloma): engrosamiento delimitado de la piel con el coadyuvante endurecimiento y pérdida de pelo.
- Hiperpigmentación: el incremento del almacenamiento en la piel del pigmento melanina.
- Hipopigmentación: reducción de la pigmentación, sobre todo en el pelo de la piel afectada.
Monday, May 7, 2012
Diaquilón
Diachylon (from Lat diachȳlōn, representing Gr διὰ χυλων, "[a medicament] composed of juices"[1]), also rendered diachylum or diaculum, was originally a kind of medicament made of the juices of several plants (thus its name), but now commonly the name for lead-plaster, emplastrum plumbi—a plaster made of lead oxide boiled together with olive oil and water. It is applied to sheets of linen, and works as an adhesive plaster when heated.[1]
Historically, several different types of diachylons have been described. White, or simple, diacyhlon is compounded of common oil, litharge of gold (litharge mixed with red lead), and adhesives drawn from the root of the Althaea, the seeds of flax and fenugreek. The diachylon called direatum has for its basis the common white diachylon, but with every pound of which is mixed an ounce of powder of Iris; this plaster digests, incides, and ripens with more force than the simple diachylon.[2]
There is also the great diachylon, or diachylon magnum, composed of litharge of gold, oils of iris, chamomile, and aneth, turpentine, pine resin, yellow wax, and adhesives derived from flax, fenugreek, with new figs, raisins of Damascus, icthyocolla, juices of iris, squill, and hyssop. This diachylon was said to soften hard swellings called scirrhus, and dissipate tumors.[2]
The diachylon gummatum is the great diachylon with the addition of gum ammoniac, galbanum, and sagapenum, dissolved with wine, and boiled to a consistency of honey. This plaster was believed the most power of all for digesting, ripening, and resolving.[2]
Use as abortifacient
In the late 1800s, working-class women discovered that lead poisoning caused by ingesting diachylon could cause abortion, or, as they described it, "bring on their period."[3] "Diachylon was readily at hand in every working-class home for use on cuts and sores, as a plaster and for drawing milk away after parturition. Now it was put to a new use. In the words of one doctor, 'I have reason to suspect that in this district the practice of taking diachylon in the form of pills to bring on miscarriage is far more prevalent among the working-class than is generally supposed.'".[4]
Dermatofitosis y foliculitis
wellcomecollection.org/ video-anatomy-of-the-skin.aspx
http://www.biblioteca-medica.com.ar/2011/03/micologia-diapositivas.html
reference.medscape.com/../slideshow/tinea
http://www.urtherapie.de/mykose/
http://de.wikipedia.org/wiki/Tinea_barbae
Dermatophytose
Die Dermatophytose (Synonym Dermatophytie, von altgriechisch τὸ δέρμα, to derma ‚Haut‘ und τὸ φυτόν, to phyton ‚Pflanze‘) oder Tinea (lat. ‚Holzwurm‘, ‚Motte‘) ist eine durch spezielle Pilze (Dermatophyten) hervorgerufene Hautpilzerkrankung. Sie ist beschränkt auf keratinhaltige Gebilde wie die Hornschicht der Haut (Epidermomykose), Haare (Trichophytie oder Trichomykose) oder Nägel bzw. Krallen (Nagelpilz, Onychomykose). Dermatophytosen zählen zu den häufigsten Infektionskrankheiten überhaupt und treten weltweit auf.
Dermatophyten sind an bestimmte Hauptwirte angepasst, bei denen oft keine oder nur geringe Entzündungsreaktionen ausgelöst werden. Erkrankungen bei Hauptwirten verlaufen daher meist milder, aber langwieriger, als bei anderen Wirten. Nach der Hauptinfektionsquelle unterscheidet man hauptsächlich vom Menschen (anthropophile) und von Tieren (zoophile) übertragene Erreger. Da auch alle zoophilen Erreger für den Menschen krankheitsauslösend sind, stellen die von ihnen ausgelösten Dermatophytosen von Tieren auf den Menschen übertragbare Erkrankungen (Zoonosen) dar. Pilze, die durch den Kontakt mit Erdboden übertragen werden (geophile), spielen in der Praxis nur eine untergeordnete Rolle.[1][2]
Das klinische Erscheinungsbild ist sehr variabel, meist treten Hautrötung, vermehrte Schuppenbildung und Bläschen auf. Der Erregernachweis ist aufwändig und nur durch Kombination mehrerer Verfahren verlässlich, ohne ihn ist die Diagnose aber nicht sicher zu stellen. Die Behandlung erfolgt meist mit Antimykotika, begleitend sollten hygienische Maßnahmen getroffen werden.
Erreger
Dermatophyten sind Schlauchpilze (Ascomycota), die verhornte Hautgebilde besiedeln. Man unterscheidet nach der Nebenfruchtform (Anamorphe) etwa 30 Arten, die in die drei Gattungen Epidermophyton, Trichophyton und Microsporum eingeteilt werden. Zur Anzahl krankheitsauslösender Arten gibt es in der Literatur unterschiedliche Angaben, da die Systematik Änderungen unterliegt. Die Hauptfruchtformen (Teleomorphe) dieser Erreger sind Bodenbewohner und werden der Gattung Arthroderma
zugeordnet, für einige Dermatophyten sind solche perfekten
(geschlechtlichen) Formen aber bislang nicht nachgewiesen. Im Gegensatz
zu anderen Hautpilzen (Hefen, Schimmelpilze) ernähren sich Dermatophyten von Keratin und Kohlenhydraten. Sie können Keratin durch eiweißspaltende Enzyme (Keratinasen) aufschließen.[3]
Dermatophyten sind an bestimmte Hauptwirte angepasst, bei denen nur geringe Entzündungsreaktionen ausgelöst werden, was das Überleben der Pilze sichert. Daher verlaufen solche Infektionen meist milder, aber langwieriger als solche durch nicht-adaptierte Erreger. Die Hauptwirte können sogar symptomlose Träger sein und stellen das Erregerreservoir dar. Sie sind die wichtigste Infektionsquelle für andere Menschen oder Tiere.[2]
Nach der Hauptinfektionsquelle unterscheidet man hauptsächlich vom Menschen (anthropophile) und von Tieren (zoophile) übertragene Erreger. Alle zoophilen Pilzarten sind vom Tier auf den Menschen, aber auch von Mensch zu Mensch übertragbar. Der Anteil der jeweiligen Pilze an Erkrankungen des Menschen variiert. So dominieren beim Fußpilz anthropophile Erreger, bei Dermatophytosen im Bereich des Kopfhaars kommen zoophile Pilze dagegen viermal häufiger vor als anthropophile.[2] Eine Übertragung anthropophiler Erreger auf Tiere ist ebenfalls möglich, wenn auch selten.[4] Darüber hinaus gibt es auch Pilze, die durch den Kontakt mit Erdboden übertragen werden (geophile), diese spielen in der Praxis allerdings nur eine untergeordnete Rolle.[1][2]
Die wichtigsten Auslöser für Dermatophytosen sind in Mitteleuropa Trichophyton rubrum (Hauptwirt: Mensch), Trichophyton mentagrophytes (var. interdigitale, auch Trichophyton interdigitale – Hauptwirt: Mensch; var. granulosum – Hauptwirte: Nagetiere und Kaninchen), Trichophyton verrucosum (Hauptwirt: Rinder) und Microsporum canis (Hauptwirt: Katzen).[2] Hinsichtlich der Erregerhäufigkeit gibt es jedoch historische und geografische Differenzen, die ihre Ursache in den unterschiedlichen Lebensbedingungen haben. So dominierten beim Menschen in Deutschland vor dem Zweiten Weltkrieg noch Microsporum audouinii und Epidermophyton floccosum. In Südeuropa und im Nahen Osten werden die meisten Dermatophytosen beim Menschen von zoophilen Erregern wie Microsporum canis und Trichophyton verrucosum verursacht.[5]
Vorkommen
Dermatophytosen kommen weltweit vor und sind häufige, wenn auch in
den allermeisten Fällen nicht lebensbedrohliche Erkrankungen. Sie treten
bei Säugetieren, Vögeln und Reptilien auf. Das Risiko, im Verlauf seines Lebens an einer Dermatophytose zu erkranken, beträgt beim Menschen etwa 10–20 %.[6] Damit gehört die Dermatophytose zu den häufigsten Infektionskrankheiten überhaupt.[7] Die Krankheitshäufigkeit (Prävalenz) für den Fußpilz beträgt in Deutschland etwa 30 %,[8] für den Nagelpilz 12,4 %.[9] Die Prävalenz bei Kindern liegt zwischen 5 und 15 %, die Anzahl der jährlichen Neuerkrankungen (Inzidenz) nach einer niederländischen Studie bei etwa 25 pro 1000 Kinder.[10]
Bei Hausrindern sind etwa 40 % der Bestände in Deutschland mit Trichophyton verrucosum infiziert, klinische Erkrankungen (Rindertrichophytie) treten bei 5 bis 60 % der Tiere innerhalb eines Bestandes auf.[11] Während die Rindertrichophytie in Norwegen durch konsequente mehrjährige Impfprogramme nahezu ausgerottet werden konnte (siehe Abschnitt Impfung), sind in Südeuropa nahezu alle Bestände befallen.[12]
Eine Studie an überwiegend hautgesunden Hauskatzen zeigte eine Befallsrate von 21,4 %.[13] Etwa 90 % der Streuner und praktisch alle Tiere in Katzenzuchten sind meist asymptomatische Träger.[14] In einer österreichischen Studie konnte bei 12,4 % der Haushunde Dermatophyten nachgewiesen werden.[15] Zum Vorkommen von Dermatophyten bei Nagetieren und Kaninchen in Heimhaltung existieren keine epidemiologischen Angaben. In Laborzuchten wurden Befallshäufigkeiten zwischen 1[16] und 70 %[17] gefunden. Hier dominieren ebenfalls symptomlose Träger, Erkrankungen treten vor allem bei Meerschweinchen auf.[18]
Krankheitsentstehung
Die Ansteckung erfolgt durch direkten oder indirekten Kontakt mit Sporen. Die Pilzsporen sind außerordentlich resistent gegenüber Umwelteinflüssen und bis zu vier Jahre infektiös.[19] Die zoophilen Dermatophyten bilden um das Haar
herum (ektotriche) Sporenrasen, so dass pilzbefallene Haare die
Hauptansteckungsquelle bilden. Auch eine Übertragung der Sporen durch
den Wind und durch Gegenstände (Kämme, Kleidung, Handtücher, Decken,
Fußmatten, Teppichböden…) ist möglich.
Damit es zu einer Pilzerkrankung kommen kann, müssen die Sporen in die Hornschicht, Nägel oder Haare eindringen. Dabei müssen sie die mechanische Barriere, die natürliche Hautflora und das Immunsystem der Haut überwinden. Einige Dermatophyten bilden β-Lactam-Antibiotika und können die den Wirt schützende Hautflora schädigen.[20] Nach Anheftung der Sporen erfolgt ein aktives Eindringen in die Hornsubstanz durch die Bildung Keratin-auflösender Enzyme. Die Fähigkeit zur Bildung verschiedener Enzyme wie Serin-, Aspartat- und Metalloproteasen sowie Hämolysinen ist ein entscheidender Virulenzfaktor von Dermatophyten.[20] Anschließend wachsen aus den Sporen die fadenförmigen Pilzzellen (Hyphen). Entzündungen und mitotisch aktives Gewebe unterbinden die Entwicklung der Hyphen.[2] Haare werden nur in der Wachstumsphase (Anagen) befallen, mit dem Übergang in die Haarerneuerungsphase (Telogen) kommt die Infektion zum Stillstand.[21]
Das Ausmaß einer Dermatophytose ist sowohl von der Anzahl der Sporen
und ihrer Virulenz als auch von Wirtsfaktoren wie Abwehrlage und
Mikroklima der Haut abhängig. Nach der Virulenz werden obligat pathogene Dermatophyten, die generell krankheitsauslösend wirken, und fakultativ pathogene Dermatophyten, die nur unter begünstigenden Umständen zu einer Erkrankung führen, unterschieden.[20] Alle zoophilen Dermatophyten sind für den Menschen obligat pathogen, die von ihnen verursachten Erkrankungen sind also Zoonosen.
Dermatophytosen kommen häufig durch kleinste Hautverletzungen zum
Ausbruch. Schwere Dermatophytosen treten nahezu ausschließlich bei
Störungen der Abwehr infolge von Immundefekten oder der Verabreichung das Immunsystem unterdrückender Medikamente (Immunsuppressiva) auf. Stress, andere Erkrankungen, Fußfehlstellungen, Durchblutungsstörungen, Hautfalten infolge von Übergewicht, häufiger Chemikalienkontakt und ein feucht-warmes Klima sind begünstigende Faktoren.[20][22]
Keratinozyten bilden bei Kontakt mit Dermatophyten-Antigenen Interleukin-8, was zu einer Einwanderung neutrophiler Granulozyten führt, die einen zellabtötenden (zytotoxischen) Effekt auf Dermatophyten haben.[23] Der Organismus reagiert auf das Eindringen der Sporen mit einer Immunantwort mit Bildung von Antikörpern (IgM und IgG). Die zelluläre Immunantwort vermag die Erkrankung im Regelfall zu stoppen. Diese Immunantwort führt nach Ausheilen der Erkrankung zu einer instabilen Immunität, die den Organismus zwar nicht vor einer erneuten Erkrankung schützt, aber in diesem Fall meist zu einer schnelleren Ausheilung führt. Bei an den Wirt angepassten Hautpilzen ist die Immunreaktion meist schwach, so dass die klinischen Erscheinungen ganz fehlen können oder nur schwach ausgeprägt sind (latente Infektion). Vermutlich sind von den Dermatophyten produzierte Glykoproteine in der Lage, die Immunantwort des Wirts abzuschwächen.[23] Andererseits, vor allem bei nicht-adaptierten Wirten, kann es auch zu einer überschießenden Immunantwort und damit allergischen Reaktionen vom Typ I und IV (→ Einteilung von Allergien) kommen.[2] Allergische Reaktionen auf chronische Dematophytosen können vermutlich auch zur Entstehung von Asthma bronchiale beitragen.[24] Viele zelluläre und molekulare Details im Ablauf der Abwehrreaktionen auf Dermatophyten sind aber bislang ungeklärt.[23]
Einteilung und klinisches Bild
...
http://www.biblioteca-medica.com.ar/2011/03/micologia-diapositivas.html
reference.medscape.com/../slideshow/tinea
http://www.urtherapie.de/mykose/
http://de.wikipedia.org/wiki/Tinea_barbae
Dermatophytose
Klassifikation nach ICD-10 | ||
---|---|---|
B35 | Dermatophytose (Tinea) | |
B35.0 | Tinea barbae und Tinea capitis | |
B35.1 | Tinea unguium | |
B35.2 | Tinea manuum | |
B35.3 | Tinea pedis | |
B35.4 | Tinea corporis | |
B35.5 | Tinea imbricata | |
B35.6 | Tinea cruris | |
B35.7 | Sonstige Dermatophytosen | |
B35.8 | Dermatophytose, nicht näher bezeichnet | |
ICD-10 online (WHO-Version 2011) |
Dermatophyten sind an bestimmte Hauptwirte angepasst, bei denen oft keine oder nur geringe Entzündungsreaktionen ausgelöst werden. Erkrankungen bei Hauptwirten verlaufen daher meist milder, aber langwieriger, als bei anderen Wirten. Nach der Hauptinfektionsquelle unterscheidet man hauptsächlich vom Menschen (anthropophile) und von Tieren (zoophile) übertragene Erreger. Da auch alle zoophilen Erreger für den Menschen krankheitsauslösend sind, stellen die von ihnen ausgelösten Dermatophytosen von Tieren auf den Menschen übertragbare Erkrankungen (Zoonosen) dar. Pilze, die durch den Kontakt mit Erdboden übertragen werden (geophile), spielen in der Praxis nur eine untergeordnete Rolle.[1][2]
Das klinische Erscheinungsbild ist sehr variabel, meist treten Hautrötung, vermehrte Schuppenbildung und Bläschen auf. Der Erregernachweis ist aufwändig und nur durch Kombination mehrerer Verfahren verlässlich, ohne ihn ist die Diagnose aber nicht sicher zu stellen. Die Behandlung erfolgt meist mit Antimykotika, begleitend sollten hygienische Maßnahmen getroffen werden.
Mikroskopisches Bild der fadenförmigen Pilzzellen (Hyphen) und Makrokonidien von Epidermophyton floccosum. Konidien sind ungeschlechtlich gebildete Sporen, die der Vermehrung der Nebenfruchtform dienen.
Dermatophyten sind an bestimmte Hauptwirte angepasst, bei denen nur geringe Entzündungsreaktionen ausgelöst werden, was das Überleben der Pilze sichert. Daher verlaufen solche Infektionen meist milder, aber langwieriger als solche durch nicht-adaptierte Erreger. Die Hauptwirte können sogar symptomlose Träger sein und stellen das Erregerreservoir dar. Sie sind die wichtigste Infektionsquelle für andere Menschen oder Tiere.[2]
Nach der Hauptinfektionsquelle unterscheidet man hauptsächlich vom Menschen (anthropophile) und von Tieren (zoophile) übertragene Erreger. Alle zoophilen Pilzarten sind vom Tier auf den Menschen, aber auch von Mensch zu Mensch übertragbar. Der Anteil der jeweiligen Pilze an Erkrankungen des Menschen variiert. So dominieren beim Fußpilz anthropophile Erreger, bei Dermatophytosen im Bereich des Kopfhaars kommen zoophile Pilze dagegen viermal häufiger vor als anthropophile.[2] Eine Übertragung anthropophiler Erreger auf Tiere ist ebenfalls möglich, wenn auch selten.[4] Darüber hinaus gibt es auch Pilze, die durch den Kontakt mit Erdboden übertragen werden (geophile), diese spielen in der Praxis allerdings nur eine untergeordnete Rolle.[1][2]
Die wichtigsten Auslöser für Dermatophytosen sind in Mitteleuropa Trichophyton rubrum (Hauptwirt: Mensch), Trichophyton mentagrophytes (var. interdigitale, auch Trichophyton interdigitale – Hauptwirt: Mensch; var. granulosum – Hauptwirte: Nagetiere und Kaninchen), Trichophyton verrucosum (Hauptwirt: Rinder) und Microsporum canis (Hauptwirt: Katzen).[2] Hinsichtlich der Erregerhäufigkeit gibt es jedoch historische und geografische Differenzen, die ihre Ursache in den unterschiedlichen Lebensbedingungen haben. So dominierten beim Menschen in Deutschland vor dem Zweiten Weltkrieg noch Microsporum audouinii und Epidermophyton floccosum. In Südeuropa und im Nahen Osten werden die meisten Dermatophytosen beim Menschen von zoophilen Erregern wie Microsporum canis und Trichophyton verrucosum verursacht.[5]
Vorkommen
Bei Hausrindern sind etwa 40 % der Bestände in Deutschland mit Trichophyton verrucosum infiziert, klinische Erkrankungen (Rindertrichophytie) treten bei 5 bis 60 % der Tiere innerhalb eines Bestandes auf.[11] Während die Rindertrichophytie in Norwegen durch konsequente mehrjährige Impfprogramme nahezu ausgerottet werden konnte (siehe Abschnitt Impfung), sind in Südeuropa nahezu alle Bestände befallen.[12]
Eine Studie an überwiegend hautgesunden Hauskatzen zeigte eine Befallsrate von 21,4 %.[13] Etwa 90 % der Streuner und praktisch alle Tiere in Katzenzuchten sind meist asymptomatische Träger.[14] In einer österreichischen Studie konnte bei 12,4 % der Haushunde Dermatophyten nachgewiesen werden.[15] Zum Vorkommen von Dermatophyten bei Nagetieren und Kaninchen in Heimhaltung existieren keine epidemiologischen Angaben. In Laborzuchten wurden Befallshäufigkeiten zwischen 1[16] und 70 %[17] gefunden. Hier dominieren ebenfalls symptomlose Träger, Erkrankungen treten vor allem bei Meerschweinchen auf.[18]
Krankheitsentstehung
Damit es zu einer Pilzerkrankung kommen kann, müssen die Sporen in die Hornschicht, Nägel oder Haare eindringen. Dabei müssen sie die mechanische Barriere, die natürliche Hautflora und das Immunsystem der Haut überwinden. Einige Dermatophyten bilden β-Lactam-Antibiotika und können die den Wirt schützende Hautflora schädigen.[20] Nach Anheftung der Sporen erfolgt ein aktives Eindringen in die Hornsubstanz durch die Bildung Keratin-auflösender Enzyme. Die Fähigkeit zur Bildung verschiedener Enzyme wie Serin-, Aspartat- und Metalloproteasen sowie Hämolysinen ist ein entscheidender Virulenzfaktor von Dermatophyten.[20] Anschließend wachsen aus den Sporen die fadenförmigen Pilzzellen (Hyphen). Entzündungen und mitotisch aktives Gewebe unterbinden die Entwicklung der Hyphen.[2] Haare werden nur in der Wachstumsphase (Anagen) befallen, mit dem Übergang in die Haarerneuerungsphase (Telogen) kommt die Infektion zum Stillstand.[21]
Neutrophile Granulozyten – eine Unterform der weißen Blutkörperchen – sind die erste Abwehrfront gegen eindringende Dermatophyten.
Keratinozyten bilden bei Kontakt mit Dermatophyten-Antigenen Interleukin-8, was zu einer Einwanderung neutrophiler Granulozyten führt, die einen zellabtötenden (zytotoxischen) Effekt auf Dermatophyten haben.[23] Der Organismus reagiert auf das Eindringen der Sporen mit einer Immunantwort mit Bildung von Antikörpern (IgM und IgG). Die zelluläre Immunantwort vermag die Erkrankung im Regelfall zu stoppen. Diese Immunantwort führt nach Ausheilen der Erkrankung zu einer instabilen Immunität, die den Organismus zwar nicht vor einer erneuten Erkrankung schützt, aber in diesem Fall meist zu einer schnelleren Ausheilung führt. Bei an den Wirt angepassten Hautpilzen ist die Immunreaktion meist schwach, so dass die klinischen Erscheinungen ganz fehlen können oder nur schwach ausgeprägt sind (latente Infektion). Vermutlich sind von den Dermatophyten produzierte Glykoproteine in der Lage, die Immunantwort des Wirts abzuschwächen.[23] Andererseits, vor allem bei nicht-adaptierten Wirten, kann es auch zu einer überschießenden Immunantwort und damit allergischen Reaktionen vom Typ I und IV (→ Einteilung von Allergien) kommen.[2] Allergische Reaktionen auf chronische Dematophytosen können vermutlich auch zur Entstehung von Asthma bronchiale beitragen.[24] Viele zelluläre und molekulare Details im Ablauf der Abwehrreaktionen auf Dermatophyten sind aber bislang ungeklärt.[23]
Einteilung und klinisches Bild
...
Friday, September 23, 2011
Probióticos y otras bacterias
Probiotics are live microorganisms thought to be beneficial to the host organism. According to the currently adopted definition by FAO/WHO, probiotics are: "Live microorganisms which when administered in adequate amounts confer a health benefit on the host".[1] Lactic acid bacteria (LAB) and bifidobacteria are the most common types of microbes used as probiotics; but certain yeasts and bacilli
may also be helpful. Probiotics are commonly consumed as part of
fermented foods with specially added active live cultures; such as in yogurt, soy yogurt, or as dietary supplements.
Etymologically, the term appears to be a composite of the Latin preposition pro ("for") and the Greek adjective βιωτικός (biotic), the latter deriving from the noun βίος (bios, "life").[2]
At the start of the 20th century, probiotics were thought to
beneficially affect the host by improving its intestinal microbial
balance, thus inhibiting pathogens and toxin producing bacteria.[3]
Today, specific health effects are being investigated and documented
including alleviation of chronic intestinal inflammatory diseases,[4] prevention and treatment of pathogen-induced diarrhea,[5] urogenital infections,[6] and atopic diseases.[7]
To date, the European Food Safety Authority has rejected most claims that are made about probiotic products, saying they are unproven.[8]
Contents
=============== ===============
The lactic acid bacteria (LAB) comprise a clade of Gram-positive, low-GC, acid-tolerant, generally non-sporulating, non-respiring rod or cocci that are associated by their common metabolic and physiological characteristics. These bacteria, usually found in decomposing plants and lactic products, produce lactic acid as the major metabolic end-product of carbohydrate fermentation. This trait has, throughout history, linked LAB with food fermentations, as acidification inhibits the growth of spoilage agents. Proteinaceous bacteriocins are produced by several LAB strains and provide an additional hurdle for spoilage and pathogenic
microorganisms. Furthermore, lactic acid and other metabolic products
contribute to the organoleptic and textural profile of a food item. The
industrial importance of the LAB is further evinced by their generally recognized as safe (GRAS) status, due to their ubiquitous appearance in food and their contribution to the healthy microflora of human mucosal surfaces. The genera that comprise the LAB are at its core Lactobacillus, Leuconostoc, Pediococcus, Lactococcus, and Streptococcus as well as the more peripheral Aerococcus, Carnobacterium, Enterococcus, Oenococcus, Sporolactobacillus, Tetragenococcus, Vagococcus, and Weisella; these belong to the order Lactobacillales.
=========== ============
Bifidobacterium is a genus of Gram-positive, non-motile, often branched anaerobic bacteria. They are ubiquitous, endosymbiotic inhabitants of the gastrointestinal tract, vagina[1][2] and mouth (B. dentium) of mammals and other animals. Bifidobacteria are one of the major genera of bacteria that make up the colon flora in mammals. Some bifidobacteria are used as probiotics.
Before the 1960s, Bifidobacterium species were collectively referred to as "Lactobacillus bifidus".
=============== ===============
MutaflorMutaflor is a probiotic consisting of a viable non-pathogenic bacteria strain named Escherichia coli Nissle 1917.[1] "The Escherichia coli strain Nissle 1917-designated DSM 6601 in the German Collection for Microorganisms in Brauschweig is one of the best-examined and therapeutically relevant bacterial strains worldwide" as claimed by the manufacturer[2]
-----------------------
Actimel
Standard Actimel (excludes variations such as Actimel Light) contains:
- Milk (fresh/powdered)
- Sugar (sucrose)
- Live Lactobacillus casei DN-114001 probiotic strain, 10 000 million per 100 mL bottle[1]
- Live yoghurt cultures
Lactobacillus delbrueckii subspecies bulgaricus (until 1984 known as Lactobacillus bulgaricus) is one of several bacteria used for the production of yoghurt. It is also found in other naturally fermented products. First identified in 1905 by the Bulgarian doctor Stamen Grigorov, the bacterium feeds on lactose to produce lactic acid, which is used to preserve milk.
It is a Gram-positive
rod that may appear long and filamentous. It is also non-motile, and it
does not form spores. This bacterium is regarded as aciduric or
acidophilic, since it requires a low pH (around 5.4-4.6) to grow
effectively. The bacterium has complex nutritional requirements,
including the inability to ferment any sugar except lactose.
----------------
Streptococcus salivarius subsp. thermophilus (common name Streptococcus thermophilus) is a Gram-positive bacteria and a homofermentative facultative anaerobe, of the viridans group.[1] It tests negative for cytochrome, oxidase and catalase, and positive for alpha-hemolytic activity.[1] It is non-motile and does not form endospores.[1]
It is also classified as a lactic acid bacterium.[2] S. thermophilus is found in fermented milk products. It is not a probiotic (it does not survive the stomach in healthy humans) and is generally used in the production of yogurt,[3] alongside Lactobacillus bulgaricus. The two species are synergistic, and S. thermophilus probably provides L. bulgaricus with folic acid and formic acid which it uses for purine synthesis
Subscribe to:
Posts (Atom)